[Salida]
En esta sencilla ruta, nos iremos encontrando con vestigios arqueológicos que dan su nombre: Molinos y Batanes, algunos con cronologías que datan del siglo XVIII.
Una corta y sencilla ruta pero que no nos dejara indiferentes, debido al paisaje que el río manzanares nos ofrece y a los elementos históricos por los que transcurre.
En esta sencilla ruta, nos iremos encontrando con vestigios arqueológicos que dan su nombre: Molinos y Batanes, algunos con cronologías que datan del siglo XVIII.
Una corta y sencilla ruta pero que no nos dejara indiferentes, debido al paisaje que el río manzanares nos ofrece y a los elementos históricos por los que transcurre.
En este punto de podremos observar la presa del grajal Inaugurada en 1908, un 19 de Junio por el rey Alfonso XIII y que embalsaba las aguas del río manzanares.
En la actualidad sus compuertas están abiertas, dejando discurrir el caudal del río a su antojo. Formo parte de una serie de infraestructuras hidráulicas realizadas en la época, por el popular Marques de Santillana.
En la actualidad sus compuertas están abiertas, dejando discurrir el caudal del río a su antojo. Formo parte de una serie de infraestructuras hidráulicas realizadas en la época, por el popular Marques de Santillana.
Frente a la pared de la presa y entre la carretera que dejamos para llegar al aparcamiento, se encuentra el puente también llamado del Grajal.
Se cree que fue Romano formando parte de la red segundaría de vías romanas que servían como ramales a la principal vía de esta zona, la calzada romana de la Fuenfría.
Digo 'se cree' por que diferentes expertos comentan que no lo fue, si no que trasladan su construcción a tiempos medievales. Según sus observaciones es demasiado estrecho para la época en que muchos otros lo catalogan, la romana.
Por otro lado también hay quien lo cataloga como Andalusí, debido a que presenta una anchura de 3,34 metros, equivalente a seis codos rassasíes, que junto con los cinco codos, eran los dos anchos más utilizados en los puentes musulmanes.
Esta discrepancia puede ser debida a posibles reconstrucciones debidas a desbordamientos y riadas sufridas, en especial las acaecidas en el 1680 y que han modificado con seguridad su forma y detalles originales, complicando su ubicación en el tiempo.
Por otro lado también hay quien lo cataloga como Andalusí, debido a que presenta una anchura de 3,34 metros, equivalente a seis codos rassasíes, que junto con los cinco codos, eran los dos anchos más utilizados en los puentes musulmanes.
Esta discrepancia puede ser debida a posibles reconstrucciones debidas a desbordamientos y riadas sufridas, en especial las acaecidas en el 1680 y que han modificado con seguridad su forma y detalles originales, complicando su ubicación en el tiempo.
Cruzaremos al otro lado de la carretera por la que llegamos buscando una bajada a una pista ancha que discurre paralela al rio.
Observando la rivera del río y a lo largo del tramo propuesto, a nuestra derecha nos encontraremos con las ruinas visibles de tres de los antiguos molinos y batanes con los que la zona en otros tiempos pasados contaba, llegando a tener a lo largo del rió 21 molinos y 19 batanes, cronologías de ellos datan algunos del S.XVIII. La mayoría de ellos ya desaparecidos o tragados por espesa maleza y por el tiempo. Afortunadamente aun a alguno de ellos podremos bajar fácilmente para explorar su ruinas.
El batán también llamado pisón, es una máquina ideada para batanar o abatanar las telas, es decir, para golpearlas. Cuando se quería que los paños tuvieran una mayor resistencia o un mayor grosor, al salir del telar se les conducía a los batanes donde recibían todo un proceso.
Se colocaban en el interior del recipiente o imia bien doblados en zigzag, en una cantidad determinada de metros (varas se decía) y allí se remojaban durante todo el tiempo que duraba el golpeteo o abatanado. A lo largo de la operación se hacían algunas paradas para cambiar de posición los paños y que el desarrollo resultase uniforme. Los canales de agua hacían mover los mazos.
Una vez secados los paños, los que estaban destinados a mantas pasaban por la cardadora para sacar el pelo con la llamada percha de cardos. Esta operación se llamaba perchar.
La ruta termina al llegar a una pequeña caseta, donde la ancha pista desaparece y son dos las sendas en las que se divide, pero el camino dejado atrás es francamente muy llamativo.
Regresaremos al aparcamiento por el mismo camino.
Tramo de la ruta |
Una vez de nuevo en el aparcamiento podemos continuar pasando al otro lado de la presa, y seguir unos 2 Km mas hasta llegar a la central hidroeléctrica del Navallar.
No tiene mucho que ver, es una central pequeña, pero que guarda su historia.
Inaugurada en el año 1900, supuso el abandono y desaparición de los molinos que se encontraban a lo largo del río Manzanares, de los cuales hemos visto sus restos.
La mencionada central fue la primera en suministrar electricidad a la capital (dicen que a la cárcel y al Palacio Real) y algunas zonas Colmenar Viejo.
Se alimentaba por un salto de agua de 100 mts formado por cuatro tubos, en la actualidad estos ha quedado reducidos a uno de 8Km de longitud, cuyo punto de partida esta en el embalse de Santillana.
En la actualidad continua operativa.
Mas información.
Localizacion.
Localizacion.
Abandonando como decimos la localidad de Colmenar viejo y en dirección a Hoyo de Manzanares, por la carretera M-618 mas conocida con este ultimo nombre, pasado el Km 6 y justo antes de pasar el puente que salva el río Manzanares, encontraremos un desvió a la derecha por un camino de tierra que nos dejara en un pequeño aparcamiento.
Situacion-google. >>
Situacion-google. >>
Datos gps.
Aparcamiento N 40° 38.915 W 003° 48.488
Distancia.
1,3 Km ida.
Apto.
Niños y mascotas.
Por las características del terreno mantenerlos vigilados.
Enlaces de interés.
Patrimonio industrial de Colmenar Viejo >>
1,3 Km ida.
Apto.
Niños y mascotas.
Por las características del terreno mantenerlos vigilados.
Enlaces de interés.
Patrimonio industrial de Colmenar Viejo >>
Fotografías realizadas por el propio autor.
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